De los tirantes a la ropa de nieve

Tras haber disfrutado de tan buen tiempo en Margalef durante los últimos días del año, el día 6 por la noche me puse en marcha para disfrutar de algún día más, cual fue mi sorpresa cuando el día 7 de Enero amaneció lloviendo, pero bueno si se trataba únicamente de un día no pasaba nada, un poco de descanso y a escalar al día siguiente. Según avanzaba el día el tiempo se complicaba, la lluvia pasó a ser nieve y en un principio me pareció gracioso pero al ver que aquello no paraba cada vez me parecía menos divertido.

La mañana del día 8 amaneció así:

Evidentemente no se podía tampoco escalar ese día, no solo porque chorreaba agua porque el frío no dejaba sacar las manos de los guantes. Pero bueno, ese día teníamos una labor, subir al sector Espadelles y recuperar las cintas de dos vías y los macutos que algunos ilusos del grupo dejaron allí.

El paseo hasta el sector no fue complicado, mucha nieve polvo. El problema era que salvo Fer y Oneka, el resto del equipo nos olvidamos de llevar la ropa de nieve y eso de estar tanto rato mojado... pone de bastante mal humor.

Menos mal que en el pueblo disponíamos del bar y del refugio dónde el calorcito nos permitía estar muy agusto.

Pero no iba a terminar así el viaje, recuperando el material y ya está, sería demasiado fácil. En la llegada al sector Fer perdió las llaves de la furgo, cuando nos lo dijo no nos lo podíamos creer (o sí tratándose de él, jeje). El caso es que al día siguiente tocaba volver a por ellas.

Mientras subían por fin pasaron las quita nieves por Margalef y con cuidado conseguimos salir del pueblo, evidentemente la suerte estaba de nuestra parte y Fer encontró las llaves, tan solo era el destino que aunque no nos dejó escalar le dio emoción al asunto.

A la vuelta nos tocó parar a quitar las placas de hielo que se formaron sobre la furgo, ya que caían como auténticos meteoritos.

A pesar de todo, sigue la motivación y las ganas de escalar y sobre todo, siguen los deberes sin hacer. Mientras el tiempo no nos permita escalar, pues a entrenar.

Yoli