Travesía en el Aneto

Cuando daban lluvia para toda la semana en Madrid y está apunto de acabar el mes de abril, vemos que dan un solecito con nubes en el piri. Decidimos arriesgamos a ir al Aneto con las tablas de travesía.Salimos el miércoles por la tarde para llegar sobre a las 11 a un pueblecito al lado de Benasque donde nos acoge mi amiga Rocío, no hay nada como tener amigos por todas partes.

El jueves con un día de perros nos acercamos a chupar el escaparate de Barrabes, ya que somos pobres y no da para comprar nada y a mirar si en los llanos del hospital esta nevando ya que en Benasque llueve. Por suerte esta nevando y decidimos tirar para el refugio de la renclusa donde pasaremos la noche. Ya al día siguiente con un día de escandalo, subimos para el aneto por la ruta del portillón superior y al llegar a este, a quitarnos las tablas y piolet en mano pasar este curioso trecho que aunque no es difícil si que hay que prestar algo de atención.

Ya al otro lado nos espera una travesía hacia el collado de coronas y luego una empinada pala hasta el Aneto. Como no llevamos cuerda para asegurar el paso de mahoma ( corta arista de gran ambiente , de no mucha dificultad , pero donde una caída es mortal y que da paso a la cumbre) y no nos la queremos jugar, nos quedamos al resguardo del viento un polín antes.y ahora es cuando viene lo bueno, una impresionante pala de nieve virgen de mas de una hora de descenso que nos deja en la zona del aigualluts. Desde allí otra vez se ponen las pieles de foca y de vuelta a los llanos del hospital por el circuito de fondo.

En total como unas diez horas de actividad, se puede hacer en menos.Ya en el coche vuelta a Madrid que el sábado hay que currar. Posdata, daros crema si no queréis que se os quede la cara como un mapache como me paso a mi.

Maki